jueves, 23 de noviembre de 2017

GALERIA DE FOTOS

Los duendes SI existen -fotos e historias reales

Los duendes SI existen -fotos e historias reales

Los duendes son seres mitológicos elementales de la naturaleza, guardianes de los bosques y de todos los seres vivos que habitan en ellos. 

Los duendes forman parte de la raza elemental feérica, y junto con sus homólogos elfos, trols y hadas, son guardianes de la naturaleza y son los seres más populares de las mitologías celta y nórdica, ya que tanto vikingos como celtas creían en la existencia de fuerzas primarias y de seres fantásticos relacionados con la naturaleza. 

Ahora, les pasare a contar porque los duendes no son parte de una mitologia sino de la realidad. No se sabe a ciencia cierta en que epoca aparecieron los primeros duendes, segun mis investigaciones el ADN de los duendes que pude obtener, deduje que es una impresionante mezcla del genoma humano, cabra y pollito. 



Nadie sabe como se llego a tal abominacion pero se cree que sucedio alrededor del año 4000 a.c. cuando un hombre, luego de intentar violar a un indefenso pollito, tuvo relaciones sexales con una cabra concibiendo luego a un hijo duende (debido a que tenia residuos del pollito en su persona) que nacio 12 meses despues y, el cual debido a su condicion fue escondido bajo tierra en una cueva que el mismo padre cavó. Lo que el padre nunca penso fue que su hijo heredaria los genes del pollito en cuanto a su reproduccion, es decir que el duende tenia en un principio la capacidad de poner huevos y ya que existian de un solo sexo no necesitan ningun tipo de actividad para poder procrear. 

Los duendes SI existen -fotos e historias reales-


Esta nueva raza se convertiria luego, alrededor del 2800 a.c en una raza de hombres comerciantes y trabajadores. Pero debido a su naturaleza fueron siempre escondidos del publico en general y sus productos eran comerciados en los mercados sin que la gente comun lo supiera ya que previamente esta mercancia era intercambiada por comida por unos pocos designados del gobiernos para interaccionar con duendes. La produccion "duendina" se basaba en muebles de madera de raiz y profilacticos de cuero de pollito. (Fueron los primeros en crear los conocidos "texturados" al dejarle las plumas en la piel de pollito antes de fabricar el condon). 


Verdad

Esa interaccion duende-humano se mantuvo en vigencia y siguio manteniendo en secreto hasta los años previos de la primer guerra mundial donde gran parte fueron exterminados debido a su determinacion de mantenerse neutrales y comerciar con todos los estados del mundo. Los restantes fueron aniquilados debido a la guerra (I y II) en si y luego los pocos que quedaron fueron muertos debido a las ondas de los celulares las cuales causan implosiones en sus pequeños cerebros y les causan incontrolables hemorroides. 

Si bien carecemos de evidencias sobre su actual supervivencia, se cree que en la lejana posibilidad de que existan se mantendran escondidos y protegidos de las ondas de los celulares en cuevas cubiertas de placas de metal y pollitos muertos. A pesar de esto muchas personas reportan haberlos visto y hasta tocado es por eso que las investigaciones siguen abiertas. 

Real 

Magia – Duendes buenos como atraerlos

Magia – Duendes 

DUENDEDice la leyenda que por cada muñeco de duende que tenga en su casa se corporizaran siete reales. Como no representan ningún peligro, usted puede tener cuantos muñecos quiera. A lo sumo, tendrá que lidiar con sus travesuras, pero si les exige que se porten bien respetuosamente, lo logrará.

Además, para mantenerlos entretenidos, puede poner una copa de cristal llena de monedas antiguas, pero no vaya a sacarles una moneda, porque ahora serán de ellos. En represalia, empezarán a esconder sus cosas.

Es probable que ellos las retiren y dejen en su lugar un montoncito de piedras. Les gusta mucho todo lo que hace música o brilla, como las geodas (piedras huecas), las lamparitas o los palos de lluvia.

Si quiere pedirles un favor, como que cuiden su casa o lugar de trabajo, ofrézcales moneditas. Dicen que ellos son nuestros amigos y a los duendes les encanta la miel, el pan con miel o azúcar, la leche y el vino tinto. Si les deja estos manjares junto a una plantita es muy probable que contemos con ellos.

Si alguien se enoja con usted, por ejemplo en la oficina, es probable que los duendes se diviertan escondiendo lo que esa persona necesita para que usted se ría. Aunque sean sólo espíritu, pueden mover objetos con su energía, pero no acostumbran hacerlo delante de las personas.

DUENDES MALIGNOS



Los duendes son seres pequenitos, traviesos, astutos, de agilidad prodigiosa, de inteligencia superior y en extremo burlones. Aparentemente, con sus actos y hechos sencillos, son inofensivos. Pero una cosa es oir relatar las travesuras y jugarrteas de los duendes, y reirse a carcajadas con el relato; y otra, es ser victima o blanco de su punteria, tema o tirria. Por lo general no se dan a ver de la gente. Hacen sus torerias como seres invisibles, y la persona o personas perjudicadas, solamente escuchan los ruidos o palpan los danos. Algunos han oido las risitas de los duendecillos, despues que acaban de hacer estos el entuerto. Como se expreso, estos seres burlones ejecutan actos sencillos, pero pertinaces y hostigadores. La mayoria de las veces les da por dejar caer "lluvias de piedras, terrones, trozos de ladrillo, etc. durante horas enteras y con frecuencia, durante varios dias consecutivos, sobre los patios y corredores de las casas. Sus habitantes, al sentirse asi acosados, se desasosiegan y aterrorizan; y al cabo de cierto tiempo, optan por abandonarlas. Pero algunas veces los duendes siguen siguen a los huyones.

Mucho se oye hablar de los duendes por todas partes, ellos se llevan a los niños sin bautizar en un abrir y cerrar de ojos. Según dice la gente en los pueblos y comarcas, que los duendes son malos espíritus, son unos enanos que tiene la planta del pie al revés, andan vestidos de rojo y caminan en fila india, siempre en grupos de cinco. Viven en los montes. La hora de salida es entre las ocho y nueve de la mañana cualquier día. Se dice que los duendes son invisibles para los ojos de los adultos, sólo los niños pequeños y los mudos lo ven y del miedo se ponen a llorar. Por eso dicen que nunca hay que dejar a un niño sólo porque los duendes se lo roban y se lo llevan a la montaña y allá convierten en duende si no a sido bautizado, aunque también se dice que los duendes se llevan a los niños ya bautizados para perderlos en las montañas.
Los duendes son como niños de la edad de cinco años. Sin viejos de edad pero son chiquititos, ese es el tamaño al que ellos llegan. Son morenos aindiaditos como el tipo de gente de Masaya. Tienen el pelo corto, liso, aindiado y llevan unos cotoncitos rojos de manta como los de chavalitos que no tienen botones, sólo van amarrados con unos lacitos. A ellos también les gustan las muchachas jóvenes sin casarse. Las invitan a que se queden a vivir con ello.



Hay duendes para cada suceso oculto de la vida: están esos asiáticos que te roban la energía en sueños; los korreds galos dedicados a la música y la danza; los cluricauns que viven en las tabernas emborrachándose de whisky; los británicos pixies que son espíritus de niños no bautizados (lo mismo que se cree aquí en Etén); los escoceses brownies asociados a los huertos y las granjas y tan susceptibles que de ser molestados se convierten en furibundos boggart; los monachielli o "pequeños frailes" que, vestidos de monje, tocan campanas y le pellizcan el trasero a las virtuosas damas puritanas. Con el dominio de la tecnología surgieron los sajones grenlims, que sabotean las máquinas y aparatos electrónicos.
El duende que vi hace dos años en Choquequirao estaba descalzo, tenía un color venoso, el ombligo salido como una fosa nasal, los cabellos como garras y las manos de ardilla. Y yo solo reía recordando mi niñez cuando desapareció y seguí caminando, pensando en que nadie me iba a creer. Reí una hora entera, media hora más... cuando ya caminaba dos horas y media mi boca estaba entumecida. Media hora más tarde encontré a un hombre en mula y le grité: "Señor, me dijeron que solo faltaba media hora para Cachora y ya llevo caminando tres...". Hizo un rictus indiferente: "Cachora está a tu espalda, te estás regresando a Choquequirao". Con el tiempo he tenido efímeros contactos con duendes buenos y con otros intermedios. 


Los duendes son seres sobrenaturales, mágicos, de pequeña estatura y tienen una actitud benévola con los seres humanos para quienes realizan trabajos domésticos, a cambio de un poco de comida Los duendes existen desde tiempos muy remotos y pueden llegar a vivir hasta 500 años. Son muy orgullosos y se ofenden fácilmente, pero lo que los caracteriza es que son muy ocurrentes y extremadamente traviesos y bromistas. Les encanta el oro y todo lo que brilla; por ello, si alguien olvida por ahí una cadenita o un anillo, los duendes seguramente lo tomarán. La primera señal de que un duende ha adoptado una familia, es que en la casa empiezan a perderse cosas, o se encuentran en los lugares más inesperados. Les fascina ocultar objetos brillosos como las llaves, Cuando están contentos en esa casa, los duendes la recorren por la noche, terminando las labores que los humanos han dejado incompletas. Hoy en día se encuentran duendes en América y Australia, ya que al adoptar una familia humana, la siguen aun cuando ésta se muda. En general todos los duendes son muy alegres, pero hay algunos bastante enojones y avaros Los duendes son muy trabajadores y cuando no están fabricando zapatos o haciendo juguetes en el Polo Norte, se dedican a buscar oro y, ¡claro!, tesoros enterrados.

duendes

EXISTEN LOS DUENDES





Origen de los duendes
¿Te has preguntado de dónde proviene la idea sobre estas criaturas? Fueron los germanos los que hace cientos de años comenzaron a hablar sobre estas criaturas que medían menos de un metro de estatura y tenían una piel de aspecto verdoso. A veces con grandes narices o con aspecto senil. Muchos dicen que son primos de las hadas.



¿Cómo te has imaginado a los duendes?
También se les conoce (según el lugar) como elfos o goblins. En la mitología alemana, se les consideraba una especie de dioses de la naturaleza, incluso relacionados con la fertilidad. Existen muchas leyendas sobre ellos que les dan características diversas. En el folklore alemán por ejemplo,se cuenta sobre un duende que aparecía cuando las personas estaban desfallecientes.

En general casi todas las tradiciones europeas concuerdan en que son seres que cuando se cruzan con humanos pueden ayudarlos o dañarlos según su estado de ánimo o lo que perciban de la persona además . Y es por eso que hay que tener mucho cuidado si nos cruzamos con uno de ellos…

Una historia sobre duendes

Hasta aquí te he contado lo que comúnmente se sabe sobre estos seres mágicos. Sin embargo, quiero contarte una historia que vivió una amiga en carne propia. Sus papás compraron una casa un poco apartada de la ciudad porque tenían negocios por la zona. La propiedad era un poco antigua y rodeada de árboles.

Al par de meses de haber llegado comenzaron a sucederse ciertos hechos raros. Las llaves no aparecían (las perdieron del todo no sé cuántas veces), los objetos como tazas, documentos, ropa o adornos parecían cambiar de lugar. A veces se escuchaban ruiditos en las habitaciones contiguas y cuando iban no encontraban absolutamente nada.
Pero lo más problemático pasó unos meses después cuando el papá de mi amiga tenía que presentar un informe en una reunión para un negocio importante. Dejó la carpeta lista con los papeles cerca a la puerta y a la mañana siguiente no estaba. Faltaban aún un par de horas para que se diera el encuentro y comenzaron a buscar por todos los rincones. ¡Parecía imposible!



Una criatura pequeña y verdosa la quedó mirando.
Toda la familia revisó mil veces por toda la casa, pero no había ni rastro. Mi amiga entró por tercera vez a su cuarto y se quedó petrificada. Detrás de su cama había un niño… No, pensándolo bien no era un niño. Era verdoso, pequeño y con grandes ojos. Tenía el folder entre sus manos. Al principio, ella no puedo reaccionar, fueron unos segundos que ambos se quedaron mirando. Por fin reaccionó y volteó el rostro para llamar a sus padres, cuando regresó la mirada… el folder estaba encima de su cama pero nada más. La criatura desapareció.
Después de eso, los sucesos se calmaron mucho. Solo muy de vez en cuando pasa algo “raro”. Sin embargo, y a pesar de todo, casi siempre se tratan de detalles que más parecen travesuras de niños que maldades.



INTRODUCCIÓN

En este bloc podrás encontrar todo lo que necesitas saber sobre las historias de duendes tanto de buenos y malos, sus orígenes, del porque su existencia. 
A lo largo de este  recorrido hemos recopilado una serie de leyendas y tradiciones de nuestra provincia. Una de ellas es la que contamos a continuación.









Los Duendes

No hay una sola persona que no haya escuchado hablar sobre los duendes. De esas pequeñas criaturas con las que las madres amedrentan a los niños: “Te van a llevar los duendes”.
Cuando era pequeño me daba miedo de encontrarme con ellos. Los duendes son unos pequeños hombres en miniatura que miden como medio metro de altura, usan boina grande y visten lujosamente, con trajes de colores. La mayor parte del tiempo andan juntos. Andan por los potreros, cafetales y caminos solitarios, no les importa si es noche o de día con tal de andar vagabundos.
Al visitar una casa se hacen invisibles, molestan demasiado, echando cochinadas en las comidas, tiran lo que se encuentre en sus manos. Pero lo que más persiguen es a los niños de corta edad, los engañan con confites y juguetes bonitos; así se los llevan de sus casas para perderlos. Si el niño no quiere irse, se lo llevan a la fuerza; aunque llore o grite. Una vez un señor, quién me merece todo respeto, contó que una noche, cuando él iba a caballo con otro amigo vio saltar un chiquito a la orilla del camino. Al ver esa figurilla en ese camino tan solitario y en horas tan inoportunas ambos se extrañaron; bajaron el ritmo de los caballos para preguntarle hacia donde se dirigía. Voy a hacer un mandadillo dijo el pequeñín. Pero a pesar de que apresuraban el paso, el pequeñín los seguía a cierta distancia, con una habilidad increíble. Aquel espectáculo los puso como piel de gallina, y no querían mirar hacia atrás; y cuando quisieron mirar, había desaparecido.
Algo muy parecido a esta historia anterior le sucedió al hijo de un amigo. Sus padres lo buscaron por todos lados, se había perdido hacía dos días, quién estaba en un potrero lejano del pueblo.
Cuando se le pregunto como había llegado allí, dijo que unos hombrecitos muy pequeños se lo habían llevado dándole confites y juguetes; pero cuando estaban lejos del pueblo, pellizcaban y molestaban y mientras lloraba, aquella jerga de chiquillos reían y bailaban.
Este suceso se comentó mucho en aquel pueblo y es digno de estudiarse por lo misterioso del caso.

Dicen las gentes que para ahuyentar los duendes de una casa, aconsejan poner un baile bien encandilado con música bien sonada.